Y tú ¿a quién buscas?

alguien me dijo hace poco "busca a Dios" y eso me hizo pensar:

Si buscar a Dios es estar yendo a misa para a la salida despotricar del prójimo: no, gracias.

Si buscar a Dios es decir un día que amas a a tu familia y a otro día lanzar los más grandes insultos a los tuyos: no, gracias.

Si buscar a Dios es rezar todo el día pero al tiempo hablar de los pecados de los demás: no, gracias.

Si buscar a Dios es predicar su palabra pero mantener en tu corazón rencores: no, gracias.

Si buscar a Dios es decir "gracias Dios" pero estar todo el día con el discurso "no ´se qué mal estoy pagando que Dios me castiga": no, gracias.

Y, en últimas ¿Por qué voy a buscar a Dios si él siempre está conmigo?

No se puede buscar lo que ya se tiene y no se puede hablar en nombre de Dios si tu boca solo sabe comunicar dolor, rabia, frustración y amargura.

Hay tanto que agradecer y tan poco tieempo para hacerlo que no vale la pena perder la vida sufriendo por los demás.


Comentarios

Entradas populares de este blog